De mi experiencia en las Caxinas, en Vila do Conde, y de las tipologías de vivienda que allí se desarrollan, me he dado cuenta de la importancia de la tipología como definidora del carácter de la intervención en el interior de manzanas de retículas urbanas ortogonales. Y tienen mucho que ver con la comunidad o la falta de ella.
La vivienda en altura genera distanciamiento respecto de la calle, y la no existencia apenas de espacios públicos condiciona en gran medida que se consoliden lazos comunes entre las personas que las habitan. La vivienda unifamiliar en hilera, propia de la parcelación intensiva de las manzanas encerradas que se vuelcan hacia las vías, generan una proximidad que, a pesar del estorbo y el ruido del automobil, crea lazos y vínculos.
Más allá del carácter tradicional de la cultura de los pescadores de las Caxinas, lo que conserva lo que son es su estructura urbana. Es decir, la comunidad sobrevivirá siempre los elementos que soportan sus vivencias se mantengan. Y en este sentido, el patio trasero es tan importante para la tipología unifamiliar de las Caxinas como la platabanda o el azulejo.
En ese sentido, las retículas urbanas burquesas, la vivienda multifamiliar se desarrolla en altura y se pierde la proximidad con el suelo. Por tanto, el patio ya ni tan siquiera es común. Puede ser uno de esos patios propiedad del propietario del bajo, pero que privacidad o falta de soleamiento, o por lo que sea, siempre aparece vacío o degradado, y normalmente vacío.
Así, en los Ensanches españoles, y el de Cerdá por sus dimensiones de manzana es uno de los más apropiados para ello, se debe generar todo el espacio público que sea posible, dentro del respeto a la propiedad privada y al presupuesto que la ciudad tiene para ello. Recordemos que son retículas consolidadas con edificios muchas veces de muros de carga, donde abrir un paso o reformar una planta para conseguirlo no resulta tan sencillo.
Por tanto, en mi opinión, la tipología dominante va a determinar el tipo de intervención, que en el caso extremo de la Retícula de Vivienda Multifamiliar de los Ensanches españoles, si su dimensión lo permite, debe ser total, ocupar la totalidad del interior de manzana.
El caso contrario es el de las Caxinas, que yo he bautizado como la Retícula Sociológica en homenaje a la comunidad que habita ese lugar de un modo que las personas de las ciudades envidiamos, y que quizá sean fenómenos puntuales a conservar en lo posible, nunca de modo arqueológico. Merece la pena respetar esta experiencia de sus vivencias, y potenciarla si es posible, pero contextualizando cada caso en el que la proximidad con la calle sea directa y genere unas relaciones tan fuertes entre las personas que la habitan.
La vivienda en altura genera distanciamiento respecto de la calle, y la no existencia apenas de espacios públicos condiciona en gran medida que se consoliden lazos comunes entre las personas que las habitan. La vivienda unifamiliar en hilera, propia de la parcelación intensiva de las manzanas encerradas que se vuelcan hacia las vías, generan una proximidad que, a pesar del estorbo y el ruido del automobil, crea lazos y vínculos.
Más allá del carácter tradicional de la cultura de los pescadores de las Caxinas, lo que conserva lo que son es su estructura urbana. Es decir, la comunidad sobrevivirá siempre los elementos que soportan sus vivencias se mantengan. Y en este sentido, el patio trasero es tan importante para la tipología unifamiliar de las Caxinas como la platabanda o el azulejo.
En ese sentido, las retículas urbanas burquesas, la vivienda multifamiliar se desarrolla en altura y se pierde la proximidad con el suelo. Por tanto, el patio ya ni tan siquiera es común. Puede ser uno de esos patios propiedad del propietario del bajo, pero que privacidad o falta de soleamiento, o por lo que sea, siempre aparece vacío o degradado, y normalmente vacío.
Así, en los Ensanches españoles, y el de Cerdá por sus dimensiones de manzana es uno de los más apropiados para ello, se debe generar todo el espacio público que sea posible, dentro del respeto a la propiedad privada y al presupuesto que la ciudad tiene para ello. Recordemos que son retículas consolidadas con edificios muchas veces de muros de carga, donde abrir un paso o reformar una planta para conseguirlo no resulta tan sencillo.
Por tanto, en mi opinión, la tipología dominante va a determinar el tipo de intervención, que en el caso extremo de la Retícula de Vivienda Multifamiliar de los Ensanches españoles, si su dimensión lo permite, debe ser total, ocupar la totalidad del interior de manzana.
El caso contrario es el de las Caxinas, que yo he bautizado como la Retícula Sociológica en homenaje a la comunidad que habita ese lugar de un modo que las personas de las ciudades envidiamos, y que quizá sean fenómenos puntuales a conservar en lo posible, nunca de modo arqueológico. Merece la pena respetar esta experiencia de sus vivencias, y potenciarla si es posible, pero contextualizando cada caso en el que la proximidad con la calle sea directa y genere unas relaciones tan fuertes entre las personas que la habitan.