El interior de la manzana tiene necesariamente que reflejar, a todos los niveles, el lugar al que pertenece. Es decir, el principio básico de intervención en el interior debe ser trasponer los valores identitarios del lugar hacia el espacio interior encerrado del logradouro.
Para ilustrarlo, en el caso de las Caxinas, la propuesta incluye, más bien recupera, un aspecto inedito de las Caxinas y de algunas otras comunidades de pescadores: la casa en el quintal. El pescador alquila su propia casa a los turistas, y se traslada durante la epoca balnear a una pequeña casa dentro de su finca, generalmente larga y estrecha, proporcionada a sus dimensiones.
La idea de estas casas varadas en el interior de la manzana, curiosamente Cerdá llama a la manzana Isla, es una metáfora de las barcas de los pescadores en la playa de las Caxinas.
Por otro lado, el mar está presente a través de una ondulante masa de agua cuya función será separar lo público de lo privado, separando la propiedad de los habitantes del logradouro del espacio público que se creará en lo que era su pequeña quinta.
Hay dos motivos para introducir el elemento agua. El primero, un motivo para mi universal, en nuestra cultura y especialmente a nivel de cualquier comunidad humana, la importancia del agua como elemento esencial de los asentamientos humanos y concretamente como elemento cultural de la arquitectura del noroeste de la península ibérica. El segundo, la trasposición metafórica de la orilla del mar, que refuerza la idea de las casas no quintal como barcas en esta isla interior. Ambos elemento compondrán una trasposición completa de este mensaje.
La fachada exterior deberá igualmente manifestarse en el interior. Es extraordinario tener la oportunidad de actuar en el contexto de las Caxinas, "campeones mundiales" de los azulejos. Casi podríamos decir de la alegría de vivir y de la expresión del inviduo en comunidad. Ninguna discreción, ninguna idea burguesa de orden y concertación. Solo expresividad y afirmación propia.
La nueva fachada interior está hecha de dos etapas bien diferentes. La primera
Las nuevas tipologías debidas a tres factores: actualización del programa habitacional, nuevo lugar el automovil en su relación con la casa, la nueva realidad de las dos fachadas públicas. Con toda seguridad, la vivienda cambiará su centro de gravedad en busca de las mejores condiciones para cada función. El desarrollo de espacios verdes en el interior de las islas es un enorme atractivo, desgraciadamente nunca materializado pese a que ya hace más de un siglo Cerdá resolvió este tema aportandonos su concepto de ruralización, y proponiendolo en su Plan de Barcelona.
En el caso de las Caxinas, es evidente que percibimos un tratamiento similar, actualizado, LIBRE, que es mejor para todos que no lo elijan los arquitectos. Que sean los habitantes de las Caxinas los que lo determinen, usando el mismo mecanismo que ha dado identidad al barrio. Pero también con la idea de la Participación de las personas en la construcción de su ambiente urbano.
Probablemente, como en las fiestas de San Pedro, que se cuelgan de los balcones las redes y los más diversos objetos, aparecerán nuevo balcones en el interior y expresarán los sentimientos y las vivencias de los moradores.
A nivel de nuestra intervención, hay dos areas fundamentales que tendrán que ver con esta trasposición del exterior para el interior: el pavimento, y la selección de las especies arboreas y vegetales. Y en el caso de las Caxinas, la idea es el cromatismo y la mezcla de colores, pero no indiscriminada. En la misma idea de lo que ocurre fuera, un logradouro no tiene la misma PALETA de colores que otro. La respuesta está en la predominancia en el exterior de unos colores u otros (ver comparativa azulejos por quarteirao). Es fantástico ver como diferentes épocas de construcción y diferentes posiciones en la trama van a reflejar un carácter cromático propio y distintivo, lo cuál nos va a permitir enunciar más adelante otro principio de intervención, la diferenciación de los espacios públicos del interior, necesaria para la percepción de situación y localización, o sea estar siempre orientado dentro de la retícula, donde en nuestro caso la refencia que orienta puede ser el color, incluso por encima de elementos identificadores escultoricos o formales. Considero que es más integro y me emociona reconocer que en pocos casos se nos brinda una oportunidad tan única como en este.
TRANSPONER. def dic RAE "Colocar algo en un lugar diferente, más allá del que ocupaba. También principal."
Para ilustrarlo, en el caso de las Caxinas, la propuesta incluye, más bien recupera, un aspecto inedito de las Caxinas y de algunas otras comunidades de pescadores: la casa en el quintal. El pescador alquila su propia casa a los turistas, y se traslada durante la epoca balnear a una pequeña casa dentro de su finca, generalmente larga y estrecha, proporcionada a sus dimensiones.
La idea de estas casas varadas en el interior de la manzana, curiosamente Cerdá llama a la manzana Isla, es una metáfora de las barcas de los pescadores en la playa de las Caxinas.
Por otro lado, el mar está presente a través de una ondulante masa de agua cuya función será separar lo público de lo privado, separando la propiedad de los habitantes del logradouro del espacio público que se creará en lo que era su pequeña quinta.
Hay dos motivos para introducir el elemento agua. El primero, un motivo para mi universal, en nuestra cultura y especialmente a nivel de cualquier comunidad humana, la importancia del agua como elemento esencial de los asentamientos humanos y concretamente como elemento cultural de la arquitectura del noroeste de la península ibérica. El segundo, la trasposición metafórica de la orilla del mar, que refuerza la idea de las casas no quintal como barcas en esta isla interior. Ambos elemento compondrán una trasposición completa de este mensaje.
La fachada exterior deberá igualmente manifestarse en el interior. Es extraordinario tener la oportunidad de actuar en el contexto de las Caxinas, "campeones mundiales" de los azulejos. Casi podríamos decir de la alegría de vivir y de la expresión del inviduo en comunidad. Ninguna discreción, ninguna idea burguesa de orden y concertación. Solo expresividad y afirmación propia.
La nueva fachada interior está hecha de dos etapas bien diferentes. La primera
Las nuevas tipologías debidas a tres factores: actualización del programa habitacional, nuevo lugar el automovil en su relación con la casa, la nueva realidad de las dos fachadas públicas. Con toda seguridad, la vivienda cambiará su centro de gravedad en busca de las mejores condiciones para cada función. El desarrollo de espacios verdes en el interior de las islas es un enorme atractivo, desgraciadamente nunca materializado pese a que ya hace más de un siglo Cerdá resolvió este tema aportandonos su concepto de ruralización, y proponiendolo en su Plan de Barcelona.
En el caso de las Caxinas, es evidente que percibimos un tratamiento similar, actualizado, LIBRE, que es mejor para todos que no lo elijan los arquitectos. Que sean los habitantes de las Caxinas los que lo determinen, usando el mismo mecanismo que ha dado identidad al barrio. Pero también con la idea de la Participación de las personas en la construcción de su ambiente urbano.
Probablemente, como en las fiestas de San Pedro, que se cuelgan de los balcones las redes y los más diversos objetos, aparecerán nuevo balcones en el interior y expresarán los sentimientos y las vivencias de los moradores.
A nivel de nuestra intervención, hay dos areas fundamentales que tendrán que ver con esta trasposición del exterior para el interior: el pavimento, y la selección de las especies arboreas y vegetales. Y en el caso de las Caxinas, la idea es el cromatismo y la mezcla de colores, pero no indiscriminada. En la misma idea de lo que ocurre fuera, un logradouro no tiene la misma PALETA de colores que otro. La respuesta está en la predominancia en el exterior de unos colores u otros (ver comparativa azulejos por quarteirao). Es fantástico ver como diferentes épocas de construcción y diferentes posiciones en la trama van a reflejar un carácter cromático propio y distintivo, lo cuál nos va a permitir enunciar más adelante otro principio de intervención, la diferenciación de los espacios públicos del interior, necesaria para la percepción de situación y localización, o sea estar siempre orientado dentro de la retícula, donde en nuestro caso la refencia que orienta puede ser el color, incluso por encima de elementos identificadores escultoricos o formales. Considero que es más integro y me emociona reconocer que en pocos casos se nos brinda una oportunidad tan única como en este.
TRANSPONER. def dic RAE "Colocar algo en un lugar diferente, más allá del que ocupaba. También principal."
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